HISTORIA DE KEVIN Y SACHA

(La tristeza de un niño es Negro Noche)

Ya vuelvo
!Oh Sacha!
Te vendré a buscar
No. No lo puedo soportar,
!Oh Sacha!
Yo no quiero,
pero te debo dejar.
Me obligan
contra mi voluntad
!Oh Sacha!
No soporto pensar
de no poder más acariciar
tu pelambrera crespa
ni tu tripita rosada
!Oh Sacha!
Ni que tu hocico húmedo
pueda más
lamer mis lágrimas,
ni tu corazón galopar
junto al mío
!Oh Sacha!
como laten juntos
en los niños y perros
cuando se abrazan.
!Oh Sacha!
Dormirás bajo el frío
de las estrellas
y no al calor del hogar.
!Oh Sacha!
No lo podré soportar,
me duele el alma
el dejarte
!Oh Sacha!
No corras por la carretera
ni pienses que no te amo
ni que te abandono
!Oh Sacha!
Habrá, seguro que habrá,
un amigo desconocido
que te acoja en su hogar
!Oh Sacha!
Hasta que yo pueda
volverte a buscar.

INSPIRADO EN KEVIN Y SU PERRITA SACHA
y en los padres intolerantes que no comprenden
los sentimientos de sus hijos con los perros.